Violencia Domestica y problemas asociados

Toda persona tiene derecho a una vida libre de violencia y las mujeres no son la excepción. Una mujer no debe perder o renunciar a este derecho mientras aún está en una relación, ya sea familiar o de cualquier otra relación.
La violencia intrafamiliar es toda situación de maltrato físico, psíquico, sexual o material cuyo perpetrador es pariente, pariente o adoptado por la persona acosada.
Las mujeres que son víctimas de violencia doméstica experimentan un ciclo de comportamiento repetitivo que se vuelve más frecuente y severo con el tiempo. Incluso si la agresión se vuelve más violenta, en algunos casos la fase de reconciliación puede desaparecer. El perpetrador elige el momento adecuado para actuar, elige estrategias para intimidar e intimida a las víctimas para mantener su dominio. La violencia no tiene nada que ver con la edad, el estado civil, la riqueza o el estatus social, todos podemos ser víctimas de la violencia porque proviene de todos los ámbitos de la vida.
El ciclo de violencia descrito por la Dra. Leonor Walker tiene tres etapas:
1. Incremento de estrés: tiempo día, semana, mes o año. Los incidentes ligeramente agresivos toman muchas formas diferentes, por ejemplo, gritos, minijuegos. En asuntos menores, una mujer evita cualquier comportamiento que pueda molestar al agresor, trata de tranquilizarlo, quiere que cambie, "acepta su abuso", niega estar enfadada por haber sido herida, encuentra excusas para culparse a sí misma, trata de minimizar el incidente . , evitar al agresor, protegerlo de un tercero, aumentar la tensión hasta que entre en la fase agresiva. El atacante, por otro lado, es emocional, sensible y ansioso, y se vuelve cada vez más violento y celoso, aumentando las amenazas y la humillación hasta que la tensión se vuelve inmanejable. .
2. Ataques agudos: duran de 2 a 24 horas. Es el estallido descontrolado de las tensiones acumuladas en el período anterior, fuera de control y completamente destruidas, siendo golpeada violentamente la víctima, buscando un lugar seguro donde esconderse y escapar del invasor. Los agresores culpan a sus esposas por la ocurrencia de esta etapa, pero pueden controlar su violencia y liberarla selectivamente, y en esta etapa pueden quejarse o buscar ayuda. 3. Actos de penitencia y amor: generalmente más largos que la segunda etapa y más cortos que la primera etapa. Se caracteriza por un acto de ternura, una persona agresiva se arrepiente y pide perdón, promete no volver a hacerlo, porque cree que el comportamiento de su esposa cambiará, ya no hay estrés, ella se siente confiada y adicta son víctimas de la disminución. agresión. Aquí, las mujeres maltratadas pueden no tener queja.
Cada par tiene su propio ritmo y los episodios de cada uno duran un tiempo característico específico, pero se produce una escalada rápida durante períodos más cortos y violentos.

El trabajo Infantil

Fuentes oficiales revelaron este viernes que el trabajo infantil se concentra en las zonas costeras y vulnerables de Costa Rica, donde persiste la desigualdad, especialmente entre negros e inmigrantes inmigrantes e indígenas, con bajos niveles de educación y altos índices de pobreza.
Las autoridades dicen que si bien Costa Rica tiene el potencial de ser el primer país de América Latina y el Caribe en eliminar el trabajo infantil, la investigación refleja la urgente necesidad de explorar el panorama general.Investigar e implementar políticas sociales contactando a quienes lo necesitan. . esta.
La iniciativa continúa con el mapeo de planes sociales e institucionales, la identificación de fuerzas activas comunitarias y reuniones con autoridades y líderes locales para implementar estrategias para acelerar la reducción del trabajo infantil y el trabajo juvenil peligroso.


La explotación sexual
La explotación sexual comercial de niños, niñas y menores es una actividad lucrativa e ilegal que deriva de una amplia gama de prácticas sociales generalizadas, abusos de poder y violencia contra el medio ambiente, por lo general son más vulnerables y vulnerables. Un fenómeno en el que los adultos consideran a los menores como objetos y productos que se venden (compran y venden) para satisfacer sus deseos y fantasías.

Diversos estudios han identificado consistentemente al menos cuatro formas o manifestaciones de abuso sexual comercial, a saber: la prostitución infantil, el turismo sexual y la trata de menores con el propósito de sexo infantil y pornografía como una necesidad social, y Explotación del cuerpo, orientación sexual y carácter de un niño o adolescente.

No es un tema exclusivo de los países en desarrollo o de las minorías, ni tampoco es el movimiento desigual de los países más pobres para proporcionar a los más ricos mercados libres para el uso y consumo de niños y niñas, aunque es bien sabido que existe una estrecha relación entre el desarrollo de los países y la industrialización































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